Tip FORMATE # 1: Mantené a tu organización siempre preparada para recibir recursos

Hoy te compartimos el Tip FORMATE – Edición 2022 #1: Mantené a tu organización siempre preparada para recibir recursos.

Ninguna OSC puede planificar su estrategia de desarrollo de recursos, sin estar en condiciones y preparada para recibir los mismos. Y cuando decimos “preparada”, hacemos referencia a estarlo desde el punto de vista legal, contable e impositivo.

En cuanto a lo legal, la organización debe encontrarse formalmente constituida y contar con personería jurídica (es decir, estar debidamente encuadrada en alguno de los tipos jurídicos reconocidos legalmente e inscripta ante el organismo de contralor que corresponda según la jurisdicción).

Asimismo, la organización debe encontrarse regular en cuanto al cumplimiento de sus obligaciones legales y estatutarias:

- Con Balances anuales confeccionados, debidamente auditados, aprobados e inscriptos (y entendiendo el valor que tienen dichos Balances, tanto para aquellas personas que forman parte de la institución como para terceros para: evaluar la situación financiera en que se encuentra la misma, tomar decisiones, conocer cómo la organización obtiene y emplea sus recursos y cómo hace frente a sus endeudamientos, etc).

- Con sus autoridades y miembros del órgano de fiscalización vigentes e inscriptos.

- Con Libros Sociales y Contables completos y al día.

- Con un Estatuto actualizado y acorde a su realidad institucional y organizacional.

A más de ello, toda OSC que esté armando o ejecutando su estrategia de desarrollo de recursos, debe entender cabalmente la dimensión legal de los actos que se lleven a cabo como parte de dicha estrategia y trabajar en la correcta formalización de los mismos desde el punto de vista jurídico (redacción y suscripción de contratos, convenios, etc) y hacerlo con la intervención de profesionales preparados, según el caso.

Siguiendo esa línea, y desde el punto de vista contable, a más de llevar sus Balances al día, la entidad deberá:

- Llevar una correcta registración de recursos y gastos.

- Trabajar en la constante bancarización de sus fondos (lo cual implica contar previamente con, al menos, una cuenta bancaria a nombre de la entidad y si es en pesos y dólares, mejor aún).

- Contar con documentación respaldatoria de cada movimiento de ingreso y egreso.

- Presentar los Balances ante los organismos que correspondan (AFIP, por ejemplo).

- Inscribirse en la UIF, de corresponder.

Impositivamente hablando, la OSC deberá:

- Tramitar (y mantener vigentes) las exenciones impositivas y el beneficio de deducibilidad de las donaciones (en caso de corresponder).

- Emitir comprobantes electrónicos.

- Bancarizar sus operaciones.

- Presentar sus DDJJ al día ante los organismos que correspondan.

- Tener la reducción del impuesto a los débitos y créditos, en caso de darse las condiciones para su solicitud.

El norte debe ser siempre la transparencia. Es importante recordar que profesionalidad, rigor y transparencia son las tres variables que dan confianza a una persona para que realice un aporte y son las tres variables que toda organización debe cuidar en forma constante para lograrlo.

Y esa transparencia, implica preparación previa por parte de la organización. Preparación para la cual va a ser fundamental que la organización cambie el chip y esté dispuesta en invertir: en RRHH (es decir, en un equipo preparado y formado en el desarrollo de recursos), en tecnología, en el acompañamiento de profesionales especializados (contadores, abogados, escribanos ), en comunicación, en infraestructura, etc.

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